Los ápidos o abejas constituyen una familia del suborden de los aculeados o porta-aguijón, orden de los himenópteros.

Los caracteres de la familia son los siguientes: antenas menos acodadas en el macho que en las hembras; tibias y tarsos ensanchados, sobre todo en las patas posteriores; primer artejo del tarso ciliado; alas anteriores que no se pliegan; cuerpo velloso, con los pelos de las patas posteriores o del abdomen destinados a recoger el polen; labio inferior y mandíbulas de gran longitud por lo general.

Hay ápidos que viven solitarios, otros reunidos en sociedad; colocan sus nidos en los muros, bajo la tierra, en los huecos de los árboles.

Alimentan sus larvas con miel o con polen; algunas especies no construyen nido y depositan sus huevos en las celdas de otras. Hay especies que son parásitas.

La gran familia de los ápidos comprende cinco subfamilias: andreninos, nomadinos, antidinos, encerinos y apinos.

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