Los acumuladores eléctricos como pilas hidroeléctricas

En rigor, un acumulador eléctrico no es más que una pila hidroeléctrica, y aunque de las pilas ha de tratarse en artículo separado, es indispensable para la buena inteligencia de lo que sigue, dar aquí una idea sucinta del tipo general de estos aparatos.

Dichas pilas se componen de un cuerpo sólido y de un líquido susceptible de atacar al primero químicamente: por ejemplo, zinc y agua acidulada. En la superficie de contacto de ambas sustancias se realiza un trabajo químico, acompañado de otro trabajo físico, que puede suponerse, ya porque así sea, ya simbólicamente, reducido a extraer éter del lado del metal y a condensarlo del lado del líquido, lo cual crea un desnivel eléctrico, o dicho en sus verdaderos términos, una diferencia de potencia o de fuerza electromotriz.

Esto es en sustancia un pila hidroeléctrica: es lo mismo que si se aplicase una máquina de vapor a extraer agua de un estanque y a elevarla a otro depósito más alto: el nivel en el primero descendería, iría subiendo en el segundo y de este modo se habría creado una caída de agua, es decir, una potencia latente que podría utilizarse en cualquier momento por medio de. turbinas, por ruedas o por cualquier receptor hidráulico apto para recoger la energía del agua al pasar ésta del nivel superior al nivel inferior y al restablecer el estado primitivo; en cuyo movimiento inverso devuelve todo el trabajo que la máquina elevatoria desarrolló poniendo en dos alturas distintas, el liquido que antes permanecía equilibrado en una sola.

Volver a ACUMULADOR – Inicio