El aislamiento en la higiene pública

Práctica que consiste en separar los enfermos de los sanos con el propósito de evitar la propagación de las enfermedades infecciosas.

El principio del aislamiento descansa en la observación vulgar. Los hechos debieron enseñar bien pronto que mientras el comercio entre sanos y enfermos en multitud de afecciones era completamente inofensivo, no así en otras que se reproducían en las personas sanas con iguales caracteres que en las ya invadidas; y como, por otra parte, la observación demostrase que el contacto de los enfermos era peligroso (contagio blenorrágico, contagio en la sarna), por una generalización prematura y exagerada se juzgó que el contagio era el medio de transmisión de las infecciones.

En este supuesto, el aislamiento, tan absoluto como fuera posible, de los sujetos atacados, surgía como medio eficaz para evitar la difusión de las enfermedades infecciosas.

Pero al mismo tiempo la observación suministraba armas contra la teoría del contagio como medio de transmisión. Individuos muy alejados de los sujetos invadidos y sin comunicación alguna con ellos caían víctimas del azote epidémico, mientras que otros inmediatamente relacionados con los enfermos no presentaban señales de contaminación.

De aquí la teoría de la propagación miasmática de las enfermedades infecciosas y la doctrina que las atribuía a constituciones atmosféricas especiales sin posibilidad de transmisión de la enfermedad de hombre a hombre.

Claro es que en el caso de infección atmosférica, que es el hecho común admitido por estas dos últimas teorías, la práctica del aislamiento no tiene razón de ser.

Las discusiones sobre el carácter contagioso o miasmático de las enfermedades que han asolado epidémicamente la especie humana, no tenían base positiva, en cuanto se ignoraba cuál fuera el agente morbífico y su modo de reproducirse y diseminarse, y sólo hoy que se poseen estos conocimientos, por lo menos respecto de algunas enfermedades, puede tratarse científicamente el problema del aislamiento.

Pero un estudio del aislamiento en general carece de utilidad por la diversidad en el modo de diseminación que corresponde a los agentes de las distintas infecciones y por la falta de datos positivos respecto a muchas de éstas. En consecuencia trataremos del aislamiento, en la profilaxia de cada infección en particular.

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