Detección de alcoholes de industria en los aguardientes

La presencia de alcoholes de industria procedentes de granos, patatas, remolachas, etc., se reconoce por el olor y gusto desagradable que suele comunicar a estos alcoholes la mezcla del alcohol amílico y otros alcoholes homólogos al alcohol vínico.

Estos alcoholes extraños pueden reconocerse también por medio de sencillas manipulaciones químicas.

Si el aguardiente es anisado, hay que empezar por separarle la esencia de anís, para lo cual no hay mas que agitar la porción que se ensaye con la décima parte de su volumen de aceite de olivas, que disuelve la esencia; se deja reposar; se decanta la capa aceitosa; se destila el líquido alcohólico restante, y en el producto alcohólico de esta destilación, ya completamente desembarazado de esencia, es donde se hacen los ensayos. Si el aguardiente no es anisado, puede obrarse sobre él directamente.

Para reconocer el alcohol amílico, se separa la capa etérea, se evapora lentamente, y el residuo aceitoso que queda denota con su aspecto y olor la presencia del alcohol amílico cuando éste existe.

El alcohol metílico se puede reconocer por varios medios, pero el más sencillo estriba en la descoloración instantánea del permanganato de potasa por el referido alcohol metílico, mientras que el alcohol etílico puro no descolorará el permanganato sino al cabo de mucho tiempo.

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