Las diversas especies que forman el grupo de los acónitos se clasifican hoy día en tres secciones: Napellus, Cammarum y Anthora.
La primera sección está caracterizada por el cáliz caduco; sépalo posterior convexo, semicircular y algunas veces nabicular; raíz tuberosa, nabiforme, de donde se origina el nombre de la especie tipo y de la sección, con raicillas fibrosas; y por sus flores azules, blancas o purpúreas, pero jamás amarillas. En esta sección se encuentra el aconitum napellus (acónito napelo, acónito azul, matalobos de flor ama), planta indígena de tallo sencillo, de un metro de altura cuando más, y muchas veces cultivado como planta de adorno en los jardines por la belleza y singularidad de sus flores azules, algunas veces ligeramente purpúreas. Esta planta es la que se emplea en medicina con el nombre de acónito, y con la cual se prepara el extracto y la tintura de acónito. Sus propiedades varían, según parece, con el clima, pues Linneo cuenta que en la Laponia se comen las yemas tiernas, mientras que en España originarían los más terribles envenenamientos. En la India se encuentra otro acónito, denominado aconitum ferox o aconitum virosum, que muchos botánicos ingleses consideran como una variedad del napelo, que tiene más intensas aún las propiedades tóxicas. Este acónito feroz, que crece en el Himalaya y el Nepal, es con el que se fabrica el célebre veneno Bish, Bishy o Vishi y con el que los indígenas emponzoñaban la punta de sus flechas.
La segunda sección, Cammarum, tiene las hojas con lóbulos cuneiformes y el sépalo posterior del cáliz muy desarrollado y muy ancho; la raíz nabiforme; las flores son azules, manchadas de blanco o rosa. Se incluye en esta sección el aconitum panicalatum, llamado también lycoctonum autumnale y aconitum licoctonum, conocido vulgarmente con los nombres de acónito licoctono, matalobos de flor amarilla, anapelo de Jaraba, etc. Vegeta en Europa en los parajes elevados, tiene la raíz fibrosa y negruzca y el tallo de unos 60 centímetros de altura, delgado, inclinado y ramoso, las hojas anchas, redondas y hundidas en muchos sitios; las flores, de color amarillo pálido, compuestas de cinco pétalos desiguales; las semillas angulosas y negruzcas. El nombre vulgar de matalobos trae su origen del uso que hacen los pastores de la raíz de esta planta para hacer preparaciones alimenticias con que envenenan los lobos. El aeonitum cammarum o acónito de flores grandes se incluye también en esta sección y se cultiva como planta de adorno por sus hermosas flores azules unas, rojas, blancas, matizadas otras.
La tercera sección, o Anthora, comprende especies de acónitos que tienen el cáliz persistente alrededor del fruto; hojas divididas en numerosos segmentos lineares y flores de color amarillo claro y a veces con tinte azul; siempre con olor agradable. Es tipo de esta sección el aconitum anthora, que ha sido considerado por algunos como un género particular, anthora vulgaris. Se le conoce vulgarmente con el nombre de acónito salutífero, porque equivocadamente se creía que era contraveneno de las otras especies de acónito, y es planta que crece en los Pirineos, en varias comarcas montañosas de España y en otros puntos agrestes de Europa y del Asia boreal. Su raíz es de dos cuerpos carnosos, del tamaño de una avellana, amarilla por fuera y blanca por dentro. La semilla es angulosa, arrugada y negruzca.
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