En los campos se emplean en las construcciones toda clase de maderas con tal que tengan las dimensiones convenientes; los más baratos y que menos cargan los muros son el sauce (Salir alba caprea), el álamo (Populus alba, nigra, trémula), el abedul (Betula alba), el arce (Acer pseudo-platanus, platanoicles, opulifolia), el pino y el ciprés ordinario (Cupressus sempervirens).

Para construcciones urbanas, los más apreciados son la encina (Quercus robur pedunculata, haliferos, tauza) y el castaño (Fagus castanea). También el pino (Pinos rubra, elata, laricio) y el alerce (Pinos larix).

El fresno (Fraxinus excelsior y ornus), el loto (Cdtis occidentales), el olmo (Ulmus campestris y tortuosus), el carpino (Carpinus betulus), el plátano tortuoso (Platanus nodosus), sirven para las obras de carretería en grande escala.

El cerezo silvestre (Corpus mas), el avellano de los bosques (Corylus sylvestris), el oxiacanto (Cratcegus oxyacctntha), el acebo común (Ilex aquifolium) dan leña para las obras pequeñas, peldaños de escalera, ruedas de coches, etc.

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