Análisis de los datos de la balanza de comercio

Véase pues, como aun siendo muy estimables los datos de las Balanzas de comercio, sólo nos enseñan una parte de los hechos a que se refieren, no pueden ser tomados en absoluto y quedan reducidos a la condición de uno de los elementos que deben estudiarse para formar juicio acerca de la situación económica de dos naciones.

Los guarismos que expresan valores son los que han de mirarse con mayor prevención y los que exigen más reserva; los que enumeran cantidades de mercaderías son los más exactos y los que mayor utilidad encierran. Estos últimos son los que dicen elocuentemente si el comercio exterior de una nación progresa, se detiene o retrocede, señalan con toda claridad las direcciones que toma y ponen de manifiesto cuáles son las corrientes más poderosas que le alimentan. Consultándolos, aprenderá cada país que los artículos dominantes en su exportación son los que él obtiene en mejores condiciones de calidad y de precio, los que de su esfuerzo reclaman los otros pueblos, y que está por consiguiente en el caso de fomentar las industrias que dan tales productos, para cumplir con la admirable ley de la división del trabajo y satisfacer su propia conveniencia.

Asimismo, el predominio de objetos determinados en la importación marca a las naciones aquellas cosas que necesitan y no pueden o no saben producir y que les interesa buscar para sus cambios.

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