Ácido anímico y anisoico

1° Ácido anímico.

Ácido que se origina por la oxidación de la esencia de anís y cuya formula es C8H8O3.

Para prepararlo se hierve la esencia de anís con ácido nítrico de 1,2 de densidad, en cuyo caso la esencia se transforma en ácido anísico y en nitranisido. Se puede obtener también por síntesis haciendo actuar el paraoxibenzoato dipotásico sobre el ioduro de metilo. De este modo se obtiene el éter dimetílico del ácido paraoxibenzoico. Este éter tratado por la potasa se saponifica en parte y da ácido anísico.

Cristaliza en prismas incoloros, inodoros, pertenecientes al sistema clino-rómbico; se disuelve en bastante proporción en el agua caliente y muy poco en el agua fría. Es muy soluble en el alcohol y en el éter, sobre todo en caliente. Se funde a 175°; a una temperatura más alta se volatiliza sin alteración; enrojece el tornasol.

Destilado sobre barita, se desdobla en fenato de metilo (anisol) y en anhídrido carbónico. El ácido nítrico concentrado e hirviendo le transforma en ácido nitranísico; una mezcla de ácido nítrico y ácido sulfúrico concentrado produce con el ácido anísico, el fenato de metilo trinitrado.

Los ácidos que se obtienen por la oxidación de las esencias de estragón y de hinojo amargo tienen la misma composición y constitución que el ácido anísico, de suerte que aun cuando se les había considerado como distintos y dado nombres diferentes, hoy día se conceptúan todos como idénticos al ácido anísico.

El ácido anísico es monobásico; sus combinaciones con las bases constituyen los anisatos.

2° Ácido anisoico.

Producto de la oxidación de la esencia del anís estrellado.

Para obtenerle se calienta la esencia de anís estrellado con ácido nítrico de 1,2 de densidad; inmediatamente se forma un producto aceitoso que se reúne en el fondo de la vasija. Separado este producto aceitoso se agita con bisulfito sódico, y por enfriamiento se depositan cristales de anisoato sódico; se tratan después estos cristales por ácido sulfúrico diluido y queda aislado el ácido anisoico, que se separa, evaporando la masa y tratando el residuo por alcohol absoluto que disuelve el ácido anisoico y no el sulfato.

El ácido anisoico cristaliza en láminas pequeñas, muy solubles en el agua a la que comunican una reacción ácida muy fuerte; es también soluble en el alcohol y en el éter. Se funde a 120° y no puede volatilizarse sin descomponerse.

Las combinaciones del ácido anisoico con las bases forman los anisatos. Los más importantes son el sódico, el barítico y el argéntico, todos ellos muy solubles en el agua.

3° Anisato.

Todo compuesto salino resultante de la unión del ácido anísico con las bases.

Casi todos son cristalizables; los alcalinos y alcalino-térreos son solubles en el agua; los de plomo, mercurio y plata son poco solubles en agua fría, pero se disuelven en el agua hirviendo; todos se descomponen fácilmente por la acción de los ácidos minerales, quedando libre el ácido anísico.

Han sido estudiados los anisatos de amonio, potasa, sosa, barita, estronciana, cal, magnesia, manganeso, alúmina, hierro, zinc, cobre, plomo, mercurio y plata.

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