Acción de los álcalis sobre el azúcar

Las soluciones de sacarosa no cambian de color cuando se hierven con lejía cáustica de sosa o de potasa; carácter que distingue aquel cuerpo de la glucosa, cuyas soluciones en las mismas circunstancias toman un tinte oscuro.

Si el hervor dura poco, experimenta una disminución notable en su poder rotatorio, pero sin que por ello sufra la menor alteración, puesto que neutralizado el álcali, adquiere de nuevo el mismo poder que tenía antes del experimento.

Tratando con alcohol o con éter las soluciones alcalinas y concentradas de azúcar, se separan éstas bajo la forma de una materia oleosa.

Fundida la sacarosa con el hidrato potásico en presencia de un poco de agua, da ácido fórmico acético y propiónico.

Destilada con el hidrato cálcico, produce acetona y metacetona.

Los compuestos sódicos de sacarosa pueden desecarse, mientras que los potásicos cáusticos o carbonatados, quedan siruposos.

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